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V

Vértigo y mareo

diferencia entre vertigo y mareo

El término vértigo no debe confundirse con mareo, pues ambos son síntomas con orígenes y características muy diferentes. Para conocer la diferencia es necesario conocer los conceptos.

Vértigo

Se trata de una sensación ilusoria o alucinatoria del movimiento de los objetos que se encuentran a nuestro alrededor o de nuestro propio cuerpo. Se trata de una sensación de giro.

Suele deberse a trastornos en el sistema vestibular, del oído interno, de la corteza cerebral o del tronco cerebral.

Existen dos tipos de vértigo, el central y el periférico.

El periférico se produce debido a un problema en el oído interno, en la parte que controla el equilibrio (laberinto vestibular o canales semicirculares) Puede ser causado por:

  • Vértigo postural.
  • Medicamentos.
  • Lesiones.
  • Inflamación del nervio vestibular.
  • Laberintitis.
  • Enfermedad de Ménière.
  • Presión en el nervio vestibular.

El vértigo central se produce por un problema en el cerebro, sobre todo en el tronco encefálico o el cerebelo. Puede ser causado por:

  • Enfermedad vascular.
  • Medicamentos.
  • Alcohol.
  • Migraña.
  • Esclerosis múltiple.
  • Accidente cerebrovascular.
  • Tumores.

Mareo

El mareo es un sentimiento de movimiento del cuerpo, una sensación que puede o no ser estimulada por un movimiento real. Viene acompañado de nauseas, sensación de desvanecimientos y debilidad. Puede llegar a producir hiperventilación.

Se puede producir:

  • Durante viajes por tierra, mar o aire.
  • Disminución de la presión arterial.
  • El organismo se encuentra deshidratado.
  • Si está enfermo.
  • Problemas cardíacos
  • Accidente cerebrovascular.
  • Hemorragias.
  • Shock.

 Diferencia entre vértigo y mareo

Ambos son síntomas de enfermedades y tienden a ser confundidos, la diferencia fundamental radica en su origen y en las sensaciones que producen.

  • En el vértigo la persona experimenta una supuesta sensación vivida y real (para ella) de movimiento.
  • El mareo puede ser producido por un movimiento externo que altere el equilibrio de nuestro organismo y otros problemas que produzcan una disminución en el aporte de oxígeno al cerebro.