Saltar al contenido
L

Limar y lijar

Para limar se emplean las limas, un instrumento de corte que cuentan con pequeños dientes colocados en las caras o cuerpo de las limas mientras que el lijar es abrillantar o suavizar algún objeto al frotarlo repetidas veces con un objeto abrasivo.

Limar

Al limar se frota un objeto con una lima o herramienta de acero con una superficie rugosa con el fin de desgastar o alisar materiales duros como la madera o el metal.

Las limas se han encontrado desde los inicios de la humanidad, es una de las primeras herramientas de corte inventadas por la humanidad. La lima más antigua se encontró en la isla de Creta en el mar Mediterráneo por una expedición arqueológica de la Universidad de Pensilvania, se cree que data del año 1500 a.C.

Las limas se empleas para desbastar y pulir superficies metálicas, madera y plástico. Son herramientas de corte y se clasifican por su picado:

  • Sencillo: una hilera de dientes.
  • Doble: dos hileras de dientes.

Estos dientes pueden estar grabados a diferentes profundidades por lo que se clasifican en: gruesa, bastarda, fina o escofina.

También se clasifican por su forma en: redondas, cuadradas, triangulares y especializadas.

Te puede interesar: Diferencia entre dimensión y unidad

Lijar

lijar

Lijar es alisar, abrillantar o limpiar una superficie con un objeto abrasivo. El lijado es una tarea importante en los trabajos de acabados tales como pintura o barniz.

El lijado puede hacerse a mano o en maquinas eléctricas como lijadoras o taladros.

Las lijas suelen ser materiales abrasivos, también se conoce como lija a la herramienta consistente en un soporte donde se coloca el papel de lija o polvo de esmeril para lijar una pieza.

El lijado remueve fragmentos pequeños de material de una superficie para dejar las caras lisas y como preparación antes de pintar o aplicar barniz.

Diferencias entre limar y lijar

  • Limar es pulir o perfeccionar una superficie mediante el uso de una herramienta de corte. Este término proviene del latín limare.
  • Lijar es pulir una superficie y suavizarla con el fin de mejorar el acabado superficial.