La principal diferencia entre un ateo y un agnóstico es en sus creencias sobre la existencia de Dios o de cualquier tipo de ser sobrenatural.
Un ateo simplemente no cree en la existencia de Dios o cualquier otro ser sobrenatural, mientras que un agnóstico considera que es imposible saber con certeza si Dios o cualquier otro ser sobrenatural existen o no.
En otras palabras, un ateo es alguien que niega la existencia de Dios, mientras que un agnóstico duda de la existencia de Dios y cree que es imposible conocer la verdad sobre su existencia.
Ateo
Un ateo es una persona que no cree en la existencia de un dios o de dioses. Esto significa que no adoran a ningún ser supremo y no creen en la existencia de una fuerza sobrenatural que gobierna el universo.
Muchas personas que se consideran a sí mismas ateas simplemente no ven evidencia suficiente para creer en la existencia de un dios, mientras que otras pueden ser más militantes en su rechazo a la creencia en un dios.
Agnóstico
Un agnóstico es alguien que cree que no es posible saber con certeza si Dios o dioses existen o no. Los agnósticos sostienen que la existencia de Dios es un tema sobre el que es imposible tener certeza, ya sea porque no hay suficiente evidencia para demostrar su existencia o porque la naturaleza misma de Dios es tan misteriosa que no puede ser comprendida por el ser humano.
Los agnósticos pueden creer en la posibilidad de que Dios exista, pero también pueden no tener ninguna opinión sobre el tema.
En general, los agnósticos se caracterizan por su actitud de apertura hacia la posibilidad de que Dios exista, pero también por su falta de certeza en cuanto a si esto es realmente así.